01 junio 2012

Los Viajes del Imserso, por Paco Acosta

Siempre le he tenido “prevención” a estos viajes para personas mayores.  Posiblemente por las imágenes que de ellos nos trasmitían los medios de comunicación, al llegar la temporada “baja” del turismo y sobre todo en fechas próximas a elecciones…...

En alguna de esas imágenes un grupo de ancianos, de uno y otro sexo, siguiendo las indicaciones de un “animador”, se ejercitaba, con bastante jolgorio, para intentar repetir unos sencillos movimientos.


 

En otras los venerables ancianos, de todo tipo y pelaje, bailaban agarrados, en las improvisadas pistas de los hoteles, sin importarles los achaques y bajo la curiosidad, e incluso, la mirada aviesa y criticona de los que permanecían sentados.

 


Yo, veía en estas manifestaciones de los mayores, una forma de divertimento impropia de su edad, y no imaginaba a mis padres en este tipo de circunstancias, pues ellos preferían las tranquilas charlas de amigos alrededor de una mesa.

No quiero menospreciar aquí los intentos de los poderes públicos por hacer más agradable la vida, muchas veces monótona, de los abuelos. Me limito a indicar que “vista desde el otro lado” no compartía esta forma de gastar el dinero público. Para mí era preferible subirles la pensión y que fueran ellos los que gastasen sus caudales como quisieran.

Cuando me llegó la hora de abandonar la vida activa, y el paso a la jubilación, me comentaron lo de los viajes del Imserso…. ¡Vade retro, Satanás! Además de los evidentes “inconvenientes” de los viajes en grupo, éstos estarían específicamente diseñados para personas mayores, cuya única “aspiración” sería, además de los jolgorios antes mencionados, el comer sin “hartura” en los buffets libres….. Nunca me vería involucrado en tales desatinos….

 


Este año descubrí, que además de los viajes “en grupo”, existía la posibilidad de “ir por libre”, es decir el transporte corre por tu cuenta y a ti te entregan un “bono de hotel”, para unas fechas previamente establecidas. Es decir, además de no verte integrado en un grupo, con el que evidentemente no tienes nada en común, excepto el estar jubilado, tienes la posibilidad de moverte libremente, si el viaje lo haces en tu coche. Esto ya me animó algo, y aunque
mantenía ciertas reservas, me interesé en el Programa de Vacaciones para Mayores y para el Mantenimiento del Empleo en las Zonas Turísticas, que así es como se denomina oficialmente.

En su día cumplimenté la pertinente solicitud, formando “grupo de dos” con mi esposa, y al cabo de unos meses recibí la acreditación de estar “en cobertura de vacantes”, es decir, debido a la gran demanda, según el baremo establecido, quedaba “excluido” de la primera asignación de plazas, pero que, aun así, me daban la oportunidad de cubrir las plazas vacantes, si las hubiera. Para ello me asignaban un día específico, y una clave con la que poder realizar la reserva, si tenía éxito en el intento.

El día señalado entré y comprobé que las fechas “aparentemente mejores” ya estaban reservadas y quedaban relativamente pocas opciones. No obstante, y sin mucho tiempo para meditarlo, logré “pillar” una estancia de 8 días en un hotel de 4 estrellas en la costa gerundense, para finales de Enero, en régimen de pensión completa, eso sí con el transporte por mi cuenta. Efectivamente, no eran fechas para “veranear”, pero desde hacía tiempo quería darme una vuelta tranquila por el Ampurdán sin demasiadas  aglomeraciones…..

Y allí fuimos bastante preparados, provistos de abundante documentación, con una agenda ajustada, dispuestos a recorrer aquella zona a nuestro aire, centrándonos en la visita a museos y monumentos. El plan de visitas comprendía tanto los que ineludiblemente forman parte de los circuitos turísticos, como los que quedan alejados, y sin embargo tenían “a priori” buena pinta. No siempre acerté, pero no me arrepiento de haberlos visitado.

Afortunadamente tuvimos buen tiempo, y recorrer las ruinas de Ampurias, griega o romana, en casi soledad (seríamos 4 ó 5 los visitantes que aquel día coincidimos allí), es una experiencia difícil de olvidar. 


 

El románico catalán, pudimos contemplarlo “in-situ” con toda tranquilidad, sin agobios, recreándonos en lo que veíamos. Pero no se trata de glosar ahora este viaje en concreto, sino de hablar de lo que se puede esperar de los viajes del Imserso (Instituto de Mayores y Servicios Sociales, para los que no lo sepan).

 

El Hotel

El hotel (supongo que todos serán poco más o menos así), oficialmente un 4 estrellas, se trataba de uno de esos impersonales de más de 400 habitaciones, donde pasas completamente desapercibido y más si, como tú, allí se alojan otro montón de jubilados. En peores plazas hemos toreado…..

Nada más llegar me dieron una “cita” para una reunión en la que me presentarían al “responsable oficial del grupo de Madrid”, para entre otras cosas informar de los “servicios médicos disponibles” e intentar hacernos allí la vida más entretenida (excursiones adicionales, diversiones y servicios incluidos). Aún me deben estar buscando…

 


La comida en el hotel (repito, pensión completa; aunque en mi caso generalmente no hice uso de la misma a mediodía), rancho en plan buffet, sin nada que destacase, ni la variedad ni la calidad (algunos mas exigentes dirían que se trataba de bazofia incomestible, pero eso sería exagerar algo). De todas formas pude notar que los grupos de mayores, olvidándose de dietas, atacaban con verdadera fruición las diferentes bandejas, y sin recordar el colesterol, la tensión, ni la diabetes, daban buena cuenta (en oleadas sucesivas) de grasas, fritos, y pasteles, hasta dejar temblando al jefe de cocina…..

Las habitaciones, muy estándar, diría que espartanas, y el servicio “normal” en cuanto a limpieza y atención. La diversión oficial, es decir la animación y juerga, específica para los mayores allí alojados, se presentaba diariamente en unos cartelones en las inmediaciones del comedor (actuaciones de cantantes e ilusionistas, karaokes, “música disco”, etc.), no resultaba molesta para los que no participábamos. Éramos unos huéspedes más del hotel….., y hasta pudimos pasar desapercibidos.

En conclusión, que en ese plan (es decir montándotelo por tu cuenta y riesgo), sobre la base de unos precios bastante económicos (8 días, 7 noches por 101€/persona en habitación doble), y sabiendo que, además estás contribuyendo a que se mantenga el empleo en una zona turística deprimida y a que así el hotel no tenga que cerrar por falta de clientes, pienso
en …¡intentarlo de nuevo este año, en otro lugar de España!. Si me dan opción…

El proceso de solicitud y asignación de plazas

Para los que aún no lo hayan “experimentado” y tengan curiosidad por saber algo más, ahí van unos enlaces:

http://www.imserso.es/imserso_01/envejecimiento_activo/vacaciones/index.htm

http://www.mundosenior.es/portal/page/portal/MundoSenior/Homes/Home_2b

El pasado año el plazo de solicitud se abrió en Mayo. Los viajes, se podían realizar entre Octubre y Junio, es decir en la considerada temporada baja del turismo.

Este año no se si, por los recortes, habrá “fondos suficientes” para seguir patrocinando estos viajes.......

Ah, y ¡cada uno habla de la feria según le va!

9 comentarios:

  1. Hace como 15 años, aún lejos de la edad de "merecer" estar en la categoría de viajero jubilado y subvencionado, tuve una experiencia colateral con la organización.
    Un matrimonio amigo y nosotros decidimos pasar un "viaducto" en la zona de Alicante, Murcia, La Manga y con una oferta de agencia nos alojamos en un hotel en Guardamar del Segura, caímos sin saberlo y quererlo en un 4 estrellas, en 1ª línea de playa, en un mes de marzo y ocupado por varios grupos del Imserso.
    El hotel moderno pero sin mantenimiento, sucio y con todos sus hermosos ventanales cara a la playa sucios de la arena y el agua del mar, dejado. Daba cualquier impresión menos agradable.

    El ambiente de los excursionistas tal y como lo describes, peleas por coger sitio en la cola del comedor, bandejas vacías y platos a rebosar, gritos y jaleo. Había que abstraerse bastante en aquel maremagnum.
    Nos dejo muy mal recuerdo y a partir de entonces pregunto si el hotel que reservo está dentro de los circuitos del Imserso.
    Puede ser que con los años haya mejorado y desde luego es una opción para viajar de forma asequible. Habrá que investigar y arriesgarse. Quizá para viajes fuera de España pueda estar mejor aunque la independencia del transporte se reduciría.

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  2. Hola:

    Con esto de la crisis, los costes de viajes con y sin Imserso son ya muy similares (ej., Halcón viajes) y para recorridos modestos hay un montón de agencias cada vez más baratas. Y la oferta muy amplia y controlas tú... (la única condición es ir fuera de temporada, que es cuando los hoteles pían por tener clientela)

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  3. La clientela del Imserso es perfectamente respetable. En su mayoría son personas que, por infinitas razones, no han podido alcanzar (a) un nivel de formación que les permita divertirse sin someterse a las reglas que regulan el rebaño o (b) un nivel económico que les permita viajar por su cuenta. En no pocos casos es frecuente que, aún contando con una economía lo bastante sólida como para permitirse mayores alegrías, prefieren no salirse del grupo protector que les cuida, que les lleva y que les trae sin que deban ellos preocuparse de mucho más que hallarse listos y en estado de revista a las horas señaladas, las que sean y para lo que sea. Así disfrutan lo mismo de una semana en pensión conpleta en un mugriento hotel de sol y playa que de una excursión en autobús por esas carreteras de Dios o de quien sea, y en ocasiones hasta de 'viajes culturales' por la vieja Europa donde terminan pensando que si ese día es miércoles aquello debe ser Milán. Entre los jóvenes suele ser usual mirarles con una mezcla de conmiseración y condescendencia que sólo demuestra la gran imbecilidad que suelen aparejar los pocos años. También sucede, a una escala menor, que sus iguales en vetustez pero mejor dotados en cuanto a educación, dinero y hasta podría ser que inteligencia (la pobreza suele apolillarla) les miren igualmente con un punto de desprecio, cosa que revela muy poca caridad cristiana (los ateos solemos ser mucho más caritativos que los creyentes). En cualquier caso estas reacciones son erróneas, porque los yayos del Imserso atesoran algo que los verdaderamente espabilados sí saben valorar: a su debido tiempo votan, y en general pueden hacerlo durante muchos, muchos años. Si los carcamales de 65 en adelante llevamos camino de ser el veintitantos por ciento de la población, y dado que al andar sobrados de tiempo rara vez pasamos de votar (en algo hay que entretenerse), el que mejor y más sabiamente les trate como especie (por no decir les manipule) conseguirá un margen imbatible sobre su competencia, la que sea. Hace unos cuantos años, un grupo de vejetes parecidos a nosotros Los del Ramiro, se organizaron en Francia de un modo tal que auparon a Mitterand sobre un Giscard d'Estaing que se veía reelegido sin despeinarse, el muy capullo. Esos colegas franceses se llamaron a sí mismos 'Panteras Grises', y aunque no sabría cuantificar ni detallar el beneficio que consiguieron al decidir aquellas elecciones presidenciales (y otras de calado menor, nacionales, regionales y municipales), lo cierto es que los yayos del Imserso francés viajan bastante mejor, y a mejores sitios, que los nuestros. Para comprobarlo basta con darse una vuelta por Maspalomas y la Playa del Inglés entre marzo y noviembre de cada año. Ya quisiéramos, los de aquí.

    Alfonso el Malo

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  4. Como siempre, lo que escribes es inteligente, razonable, bien escrito y digno de tenerse en cuenta.
    ¡Ojala lleguemos a adquirir el poder de "los Panteras Grises" franceses! y no solo por conseguir mejor nivel en los viajes de abuelos. Pero creo que para conseguir eso, además tenemos que asegurar la mejora en la educación de los que vienen detras y que esa mejora se traduzca en menor sentimiento de rebaño que el actualmente existente.

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    1. Mejorar la educación de los que vienen detrás no es cosa por la que nos debamos preocupar, porque los efectos serían a muy largo plazo y no tenemos tanto tiempo por delante. Aglutinar a nuestros iguales y mayores en defensa de nuestros intereses, buscando la fuerza que nos otorgaría una unión electoral, sí está en nuestro radio de acción. Mejorar nuestras condiciones de vida invocando la bondad, la magnanimidad y la caridad de los que mandan, o cuando menos el buen rollo, sería una ingenuidad por no decir una utopía, además de un pérdida del escaso tiempo que nos queda. Nuestro poder (de llegar a conquistar alguno) residirá en nuestra capacidad de desequilibrar elecciones, y para eso, lo primero de todo, será estar lo bastante unidos para explicar a los que mandan que, o nos tratan mejor, o votaremos por los otros, los que sean. Sólo así, por la fuerza (la de los muchos que podemos llegar a ser), conseguiremos que los del Imserso nos lleven cada invierno quince días al Caribe, nos consigan mulatonas que nos cuiden y nos mimen, y que para cenar nos dén caipirinhas, caviar y langosta con Taittinger, y no esas paellas lamentables sobre las que dicen que nos abalanzamos y que tanto espantan a Manolo.

      Alfonso el Materialista

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  5. Es muy loable que la Sra Paka de Bollullos del Condado pueda ver el mar a sus 70 años, me parece perfecto que se sostenga el turismo. Pero yo lo que he visto en mis viajes a Benidorm, cidad reina de este tipo de viajes del IMSERSO, me ha parecido deprimente.

    Los "yayos" españoles los primeros, se abalanzan sobre las paellas o lo que ofrezca el Chef. Los viejos guiris son artistas en el baile. En fin un colectivo en el que no pienso enrolarme aunque me regalen el viaje

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  6. Los que vivís en Madrid podéis aprovechar la promoción "Mayores por 1€" para ir al cine los martes.

    Ahora se puede ver El exótico hotel Marigold, que trata sobre mayores, viaje y hoteles....., que no siempre responden a lo imaginado (ni el viaje, ni el hotel, ni siquiera la propia vida en esta etapa....).

    Como para pensárselo....

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    1. Si Paco, ayer disfruté con mi mujer del cine por un euro. Vi esa película de los jubilados, pero al leer de que iba pasé de ella y nos fuimos a ver las fantasías de Blancanieves, que nos distrajo mucho y nos permitió disfrutar de una madrastra rubia malísima pero guapísima. Saludos

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  7. Mañana me voy con mi mujer y una pareja de amigos ¡por primera vez! a un viaje del imserso ése, a ver qué tal. El destino es Ibiza, en un momento que todavía hace calorcillo, no hay ambiente discotequero y en avión, de forma que no iremos en manada.
    Parece económico; hay quien dice que sale más barato que quedarse en casa; puede ser...
    Tengo la sensación que los viejetes (aún me resisto a aceptar que ya formo parte de ellos) se lo saben pasar muy bien si la salud les acompaña, de forma que tampoco me espero muchos vecinos con cachavita; en cualquier caso, al ser ya 4, tampoco haremos grandes incursiones sociales. Ya contaré mis experiencias imsersianas, sin necesidad de "imsertarme" demasiado...

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